Consejos para regalar una fragancia

Aunque esté en el ranking de los presentes más tradicionales, regalar una fragancia solo es tarea sencilla si sabemos exactamente cuál es la predilecta del agasajado o de la agasajada. Caso contrario, las dudas se multiplican, ¿le gustará o no?, ¿será muy dulce?, ¿durará poco?. Para simplificar la tarea, le consultamos al nariz Bernardo Conti, experto en la materia, qué variables debemos considerar a la hora de elegir un perfume para otra persona.

Si no sabemos exactamente cuál es la marca favorita pero conocemos la vida de quien que va a recibir el frasco, podemos tomar algunos indicios de qué es lo que puede querer o necesitar. “Por ejemplo –enumera Conti– su estilo de vida puede indicar que precise un aroma formal y elegante para el trabajo o, si sale mucho de noche, algo más sensual y, si le gusta el aire libre, prefiera uno muy fresco”.

¿Qué pasa si se trata de un presente formal y apenas conocemos al agasajado? “Lo ideal es ir a la seguro, responde el especialista. “Lo cítrico, acuoso, floral o herbal le gusta a todo el mundo. Si tenemos miedo de equivocarnos en la elección, un perfume con un estilo playa no falla nunca. Suelen ser frescos, cómodos para usar y, lo mejor, después nos recuerdan a las vacaciones”.

Por último, Conti brinda un buen dato a tener en cuenta: “Hoy en día todas las perfumerías aceptan cambios de frascos cerrados. Así que cuando obsequiamos una fragancia siempre debemos poner en la bolsa una tira olfativa impregnada en el jugo para que la persona pueda decidir si la cambia o no”.

Elegidos para ellos y ellas