Todos vivimos en espacios más chicos de lo que querríamos y necesitamos agudizar el ingenio para poder disfrutar de nuestra casa.
1. Distribución equilibrada para ganar espacio.
– Fijar prioridades y proporcionar el espacio donde mas estás.
– Darle varios usos al mismo ambiente (delimitar o abrir zonas). Ejemplo, en un rincón, cerca de la ventana colocar la mesa. Si no hay lugar para las sillas, poner ganchos en la pared y colgar sillas que sean plegables. Sobre una pared color un sillón y solo una mesita chica de apoyo.
2 Sin límites
– Si tenes dos habitaciones chiquitas, pensar en la posibilidad de tirar una de las paredes o el tabique. Así lograrás un ambiente amplio y más luminoso.
3 Repisas bien arriba
– Colocar estante cerca del techo, de manera de tener lugar de apoyo y guardado sin quitar metros.
4. Eliminar puertas.
-Hay maneras de delimitar espacio con artículos más livianos. Islas, bibliotecas, puertas corredizas, separaciones vidriadas… no tapan la luz y generan sensación de amplitud.
5. Más ventana, menos paredes
-La luz da sensación de amplitud. Los colores claros (blanco, beige, gris, crema) y la líneas simples y net en muebles y cortinas amplifican increíblemente la luz.
6. Engañar el ojo
-Para que una habitación alargada parezca más cuadrada, pintar la pared del fondo en un tono cálido. Para simular altura, el techo debe ser más claro que las paredes
7. Muebles multifunción
-Sofá cama, mesas plegables, mesas canasta para poder guardar, bancos en lugar de sillas porque caben mas personas.
8. Dos en uno
-Si tenes altura suficiente (más de 3, 50) podes armar un altillo para el dormitorio o un lugar de trabajo.
9. Usar las paredes
-Para colocar percheros, y repisas bordeando las puertas y también arriba de ellas para almacenar vajilla, libros, vinilos, cajas de guardado.
10. Apostá a las luces
-El uso del color es fundamental al sectorizar mediante iluminación. Colocar una lámpara de pie o que cuelgue del techo enfocando su luz en un rincón es una buena opción para resaltarlo.