Valeria Alonso: “Gran parte de la sociedad vive en un formato machista"

Valeria Alonso: “Gran parte de la sociedad vive en un formato machista"

Entrevista

La actriz, directora teatral y escritora reside en Madrid. Visitó Buenos Aires para presentar su novela sobre la maternidad y la violencia obstétrica que ganó un premio en España.

24/10/2023 13:17

En la actualidad, el embarazo vivido de manera consciente suele generar preguntas existenciales, la necesidad de revisar cuidados y prácticas, mirar de frente mandatos familiares y culturales. La lectura subjetiva de esta experiencia con lenguaje directo y humor se plasma en el libro Las heroínas también tienen miedo, de Valeria Alonso.

¿CÓMO FUE EL PROCESO CREATIVO DE LA NOVELA?

Cuando me embaracé de mi primer hijo empecé a transformarme profundamente y me propuse hacer algo con esa vivencia que me atravesó el cuerpo. Tomé nota de ideas e imágenes audiovisuales. Eran secuencias disparatadas, tragicómicas y otras, más que cómicas, trágicas. En las consultas médicas, sentí que me trataban muy mal; entonces, quise denunciarlo, decir algo al respecto, convertirlo en arte. Durante la pandemia, me puse en plan escritura diaria. Al principio, pensé que sería una serie, después una novela. La narradora empieza a revisar todos los aspectos de su vida para llegar, entre comillas, lista para parir y ser una madre perfecta. Obviamente, es un propósito que no conseguirá.

¿QUÉ NUEVOS Y ANTIGUOS MANDATOS SE LES PLANTEAN A LAS MUJERES ANTE EL EMBARAZO?

Todo lo que sentía no se correspondía con lo que me habían contado. El embarazo como “un estado de gracia”, la “dulce espera”, esos eslóganes no eran los que me habían marcado la sociedad, mi madre y mi abuela. Hay contrastes generacionales. En la época de mi abuela, todo esto estaba silenciado y ahora creo que tenemos la oportunidad d decir lo que no nos gusta y hablar de lo que dudamos. Poder expresarlo es una manera de empezar a vivirlo de otra forma. No significa que no quiera estar embarazada o que no quiera al bebé o formar una familia. Antes era una especie de amenaza. “Si vos no te sentís bien, quiere decir que rechazás este proceso o al hijo o a la maternidad en su totalidad”. Y no. Está todo solapado, forma parte del pack. Podemos integrar todos los aspectos que conlleva algo tan loco como tener una persona adentro y una transformación de tu vida al 100 por ciento.

¿CÓMO ES LA MATERNIDAD QUE VOS VIVISTE Y SU LADO B?

Una madre conectada, una madre que está buscando en profundidad a través de lo que le pasa, tiene una mirada más social y política de la maternidad. La otra cara soporta un poco dejarse de lado. Creo que a veces estamos tan pendientes de que los hijos tengan un espacio, sean vistos, respetados, etcétera, que corremos el riesgo de olvidarnos de nosotras mismas. En un momento me pasó eso, lo hablé en terapia. De la sensación de estar muy abocada a ser una madre presente y consciente, y me estaba volviendo loca. Nos estamos reconstruyendo, tratando de entender dónde ubicarnos. También hay un gran sector de la sociedad que vive en formato machista. Cuando me enteré de la violencia obstétrica y comencé a informarme de cómo podía y quería que fuera mi primer parto, escuché testimonios de muchas mujeres que les habían hecho todo tipo de intervenciones sin consulta. Hace dos años, en reuniones por zoom de posparto de mi segunda hija, otras contaban lo mismo. En ningún momento se plantearon si podía ser de otra forma. Creo que todavía hay mucho trabajo por hacer.

¿DE QUÉ MANERA ENCONTRASTE EL TONO DE VOZ PARA NARRAR, DESDE LO ÍNTIMO, LO EXPLÍCITO, LO ERÓTICO?

Me interesó narrar con un lenguaje espontáneo y natural, como si estuviera hablando. Busqué potenciar un diálogo interno neurótico, como haría Woody Allen. Inyectarle humor. Un detalle puede tener mucho para extraer. Al revisar todo el material informativo respecto del embarazo, reparé en la ausencia de la mención al acto sexual. Entonces, me propuse comenzar la novela con el “polvo fecundante”. Esto lo relaciono con la mujer que se atreve a hablar de su sexualidad abiertamente, del sexo como parte de la identidad, de la libertad y la búsqueda.

D.R.D.R.

¿CÓMO FUE LA RECEPCIÓN DE LAS LECTORAS HASTA AHORA?

El primer feedback fue de los hombres, los tres que conformaron el jurado (69º Premio de Novela Ateneo-Ciudad de Valladolid). Pensé que justamente por eso no iba a ganar, pero en su devolución me hicieron saber que la novela también era para ellos. Evidentemente, es una historia humana y nos involucra a todos. El hombre nunca en la vida va a vivir un proceso como el embarazo y el parto, por lo que es sumamente interesante el leerlo con tanto detalle. El texto los interpela en el sentido de cómo pueden ser o querer ser en el rol de pareja y padre.

¿QUÉ DIFERENCIA A LAS MUJERES ESPAÑOLAS DE LAS ARGENTINAS?

Varias españolas me preguntaron si era verdad la secuencia del robo en Lanús que relato en el libro, porque esa vivencia de la inseguridad no se tiene, mientras que en la Argentina hay una escucha más directa, un reconocimiento. En la novela hay una exploración de esa emoción, está en el título del libro. Las heroínas también tienen miedo propone que esas dos palabras estén en tensión.