Es uno de los últimos hallazgos en materia de belleza y estos son los pasos a seguir para conservar sus propiedades por más tiempo.
Si sos de las que están al tanto de las novedades de belleza seguramente escuchaste hablar de la esponja Konjac, el secreto de la cosmética coreana. Esta esponja está en sintonía con el concepto de slow beauty , que propone un cuidado conciente y el uso de productos respetuosos con el medio ambiente. Este ítem es de lo más natural que existe en el mercado para el cuidado de la piel. ¿Por qué? Se trata de la raíz de una planta, un producto orgánico, biodegradable, cruelty free, apto para veganos, hecho a mano, hipoalergénico, sin ningún tipo de colorantes o conservantes, libre de parabenos.
Para qué sirven
Para limpiar en profundidad la piel del rostro y del cuerpo. Ayudan a dismimuir el tamaño de los poros, equilibra el pH de la piel, absorbe el exceso de grasas y toxinas, estimula el flujo sanguíneo y la renovación celular y, además, aporta los numerosos nutrientes -vitaminas y minerales- propias de la raíz de la planta.
No hay una sola versión de esta esponja. Según la necesidad de cada piel (manchas, oleosidad, irritación, acné) hay una distinta. En Argentina, se pueden conseguir las Konjac Original en www.esponjaskonjac.com.ar y en tiendas y farmacias. Más allá de que existe una esponja para cada tipo de problemática, se pueden usar solas o acompañadas de un limpiador facial para potenciar su efectividad.
Cómo cuidarlas
Se recomienda cambiarlas cada dos o tres meses. Para que duren ese tiempo es importante saber cómo conservarlas porque al ser de pura fibra vegetal natural, la humedad las puede dañar.
1) Después de cada uso, enjuagarla bien para evitar residuos de limpiador o jabón.
2) Escurrirla al máximo con ambas manos (sin retorcerla) para que no quede agua.
3) Siempre dejarla colgada del hilito que trae en un ambiente limpio y ventilado.
4) Jamás dejarla apoyada en una superficie porque se daña.
5) Evitar ambientes húmedos y contacto directo al sol.
6) De ser necesario, se puede higienizar semanalmente con agua caliente (no hirviendo) y jabón neutro.
Algunas de las esponjas que se consiguen en Argentina. Las faciales tienen un valor de $450 y las corporales, de $510.