Algunos gestos simples y eficaces para espaciar los lavados.
Lavarse el pelo diariamente es un hábito instalado en la mayor parte de las personas. Sin embargo, esto impacta directamente sobre la salud y la belleza de nuestro cabello. Las raíces se engrasan más rápidamente, se forma una película y las puntas se dañan. Acá, algunos gestos simples y eficaces para espaciar los lavados.
Es una de las costumbres más difíciles de dejar, sobre todo si lo hacemos desde hace años. Pero si salimos del círculo vicioso de las primeras semanas, que son las más difíciles, el pelo se equilibra en poco tiempo. Las glándulas sebáceas que producen el sebo se autorregulan. El champú seco puede ser nuestro aliado hasta el siguiente lavado.
Para reducir la frecuencia de los lavados, funciona cambiar de champú en el transcurso de una misma semana en lugar de utilizar un solo producto. Podemos por ejemplo elegir un champú especial para nuestro tipo de cabello (grasoso, seco), y después utilizar uno para cabellos normales. Este ritual permite que el cuero cabelludo no se acostumbre a fórmulas muy corrosivas o demasiado nutritivas que piden lavado constante.
Si sos de lavarte muy seguido el pelo para darle movimiento y estructura, la mayoría de los especialistas sugieren que es mejor evitar los productos cuyas etiquetas prometen nutrición o brillo, porque son muy pesados y depositan una película sobre la fibra capilar y el cuero cabelludo. Mejor, elegí champúes suaves y reequilibrantes. Evitá los que tienen sulfatos y los que están enriquecidos con siliconas.
Es una técnica adoptada por muchos estilistas, que solo aplican el champú en la corona de la cabeza y masajean sin tocar las puntas. Al momento de enjuagar, las puntas se lavan con la espuma que se escurre. Además, la crema de enjuague se coloca solo en los largos, evitando el cuero cabelludo. Este gesto permite limpiar y nutrir el cabello por zonas de manera óptima.
La alimentación tiene un papel primordial en el aspecto de nuestra piel y de nuestro cabello. Una dieta muy alta en grasas y productos industriales y el cansancio ligado a carencias nutritivas son factores que alteran el pelo. Lo mejor: privilegiar fibras, frutas, verduras y frutos secos para una melena hermosa.
Para recuperar la salud capilar, lo mejor es reducir al máximo el número de productos que se utilizan. Evitá sumar sérums, mascarillas y cremas pesadas. Dejate tentar por el co-wash e invertí en una funda de almohada de seda, que mantiene la hidratación natural del pelo. Además, limpiá periódicamente tus cepillos y peines.
Vía ELLE.fr