Cúrcuma: los beneficios de una especia milenaria

Además de ser un ingrediente infaltable a la hora de preparar algún plato exótico, la cúrcuma es una planta milenaria con propiedades antioxidantes, antisépticas y digestivas que te puede ayudar a mejorar tu salud y resaltar tu belleza. La especia es oriunda de la India y se usa en diferentes ámbitos desde hace siglos. En 2018 estallaron los búsquedas en Pinterest sobre el tema: desde turmeric lattes, (cafés con leche hechos con cúrcuma) hasta mascarillas faciales, las bondades de este ingrediente lo convirtieron en un furor en las redes sociales.

Entre sus beneficios, alivia el malestar después de comer en exceso y es un muy buen antiinflamatorio estomacal en el tratamiento de la gastritis. Puede ayudar a personas que están en plan de adelgazar porque limita las grasas y ayuda a eliminarlas naturalmente. Además, es un buen aliado en casos de artritis y artrosis: sus efectos
son comparables a los del ibuprofeno.

En heridas, quemaduras y picaduras, alivia el ardor al usar una pomada de cúrcuma y agua. También disminuye la irritación de la garganta cuando se hacen gárgaras con la especia diluida en agua caliente. Aparte de ser un buen recurso en temas de salud, ayuda a mejorar el aspecto de la piel. Dadas sus propiedades antioxidantes, es un muy buen ingrediente antiage. Podés hacerte una mascarilla facial con cúrcuma, miel y yogurt natural para hidratar y combatir el paso del tiempo. Para mejorar el acné, prepará una crema natural con una cucharada de cúrcuma y una de aceite de coco. Si tenés manchas en la piel, pásate por la zona afectada la mezcla de jugo de limón y pepino con media cucharadita de cúrcuma y dejalo actuar veinte minutos antes de enjuagarte. Por último, sirve como exfoliante natural: una pasta de cúrcuma y agua es ideal para eliminar las células muertas y dejar la piel suave y luminosa.