Te damos los tips necesarios para aprovechar cada centímetro de tu armario.
Desde que la gurú del orden Marie Kondo se hizo famosa a nivel mundial, estamos obsesionadas con la organización del hogar. ¿Es verdad que una casa prolija nos hace más felices? Ini Hajnal, fundadora de The Organization Wiz, asegura que sí. “Hacer el ejercicio no solo nos ayuda en nuestro espacio físico, también puede transformarnos internamente. Porque todo lo que ocupa lugar en nuestra casa también lo ocupa en nuestra mente”, afirma. Experta en dar vueltas guardarropas propios y ajenos, nos revela los 8 pasos fundamentales para tenerlo impecable.
“Si organizamos nuestro placard vamos a poder disfrutar, no solo de la elección cotidiana de ropa de forma práctica y rápida, sino también de tiempo libre que ganaremos gracias a una buena organización. El buen uso del tiempo y el espacio son fundamentales para nuestra calidad de vida.
Terminar con los mitos
“No, no es suficiente sacar una prenda a medida que entra una nueva pero es lo mínimo necesario. Es una acción fundamental para no acumular nada, no solo ropa. Es un muy buen ejercicio de conciencia. Ya que el espacio no se multiplica, pero sí lo suelen hacer las prendas”.
“Depende el tamaño y el volumen de prendas es el tiempo que vamos a necesitar. Pero ordenar un placard standard de una pareja puede llevar entre 10 a 20 horas de trabajo. Hay que revisar prenda por prenda para decidir con qué se van a quedar, practicando un descarte consciente”.
“Antes de comenzar, siempre recomiendo realizarse las siguientes preguntas: ¿Me entra? ¿Me gusta cómo me queda? ¿Lo voy a volver a usar? ¿Lo tengo repetido? ¿Me lo compraría de nuevo? ¿Está en perfectas condiciones?”
“Las prendas se van a dividir en 4 grupos durante el descarte: lo que queda, lo que se regala, lo que se dona y lo que se tira. Lo que queda, luego se separará por categorías lógicas y fáciles de encontrar y visualizar. Si regalamos algo siempre debe estar en buen estad. Lo que donemos también. Nunca regalemos ni donemos objetos o prendas rotas o sucias. Y vamos a tirar aquello que tiene agujeros o manchas que no salen. Siempre de manera responsable y respetando el reciclaje.
“No hay uno solo. El mejor método es el que se adapta a la persona y a su estilo de vida. Por eso una organizadora profesional siempre puede ayudar al cliente a llevar a cabo la organización de la manera más eficiente y personalizada posible. Depende el tipo de tejido y del tipo de prenda si decidiremos colgarla o doblarla. Y si decidimos doblarla, tendremos que definir si irá en un cajón organizada en archivo (como nos enseña Marie Kondo) o si la ubicaremos en estantes. Todo esto dependerá del tejido, del volumen de prendas de esa categoría y del espacio con el que se cuenta. Nada de esto es standard ni igual para todos”.
“Si no la vas a volver a usar y no tiene una condición emocional (como puede ser un vestido de novia o alguna prenda de alguien que ya no está) lo mejor es no tenerla más. Pero entiendo que el sentimentalismo muchas veces le gana a la razón. La pregunta que tenemos que hacernos es: ¿para qué lo estamos guardando y ocupando espacio en nuestra casa y nuestra mente?”
“Una vez que el placard está organizado, mantenerlo realmente va a ser fácil. Habrá un lugar para cada prenda y este lugar será fácil y lógico. La idea de un buen sistema es no perder tiempo. No más de 15 minutos diarios para devolver cada prenda a su lugar. La división por categorías de prendas es fundamental y dentro de cada categoría organizar por color. De esta forma vamos a visualizar en un instante la prenda que estamos buscando. Siempre indico que tener todas las perchas deben ser iguales y una prenda por percha es super necesario para tener un armario en orden”.