¿Cómo se convierte un modelo en estrella de ventas? Respaldo de celebrities y listas de espera son algunas de las claves del fenómeno.
Hay algunas carteras que son inmunes a las tendencias, como una Chanel matelaseada o una Bottega Veneta tejida en cuero. Pero también hay modelos más efímeros, que de un día para el otro ganan status hasta que aparece el próximo objeto de deseo. Aquí rastreamos el camino de una it bag, desde que hace su debut hasta que se convierte en compra obligada de las fashionistas.
La clásica Chanel matelaseada.
“Una cartera de lujo, en definitiva, es una cartera que soporta la prueba del paso del tiempo, tanto en lo que respecta a calidad como a diseño”, dice Myriam Schaefer, el ojo creativo detrás de algunas de las carteras más memorables de las últimas dos décadas. La diseñadora parisina, que ahora tiene su línea epónima de carteras de diseño, creó uno de los modelos más icónicos de Balenciaga: la City Bag, allá por 2001.
City Bag de Balenciaga.
Después de que la cartera City debutó en la pasarela de Balenciaga en 2001, Kate Moss empezó a usarla, lo que disparó sus ventas. No era la primera vez que el poder de una celebrity ayudaba a catapultar un modelo al estrellato. Gisele Bündchen ayudó a que Mulberry se hiciera conocida cuando entró al desfile de la casa, en 2003, usando una cartera tipo tote con varias hebillas que finalmente fue bautizada con su nombre. Más recientemente, Alessandro Michele, el niño prodigio de la moda, recuperó la clásica Dionysus de Gucci con su reinterpretación moderna.
En 2005, las 8 mil unidades de la cartera Paddington de Chloé se agotaron antes de que llegaran a las tiendas gracias a una política estratégica de regalos a celebridades por parte de la marca. (Un dato: Kate Bosworth podría vender muchas de sus carteras). El mismo año, el modelo Stam de Marc Jacobs (bautizada así por Jessica Stam, la modelo canadiense) se volvió tan codiciada que las tiendas departamentales cerraron sus listas de espera. En 2017, las búsquedas de carteras Gucci se dispararon en Lyst: los modelos Marmont y Dionysus se ganaron el primer y quinto puesto de las carteras más buscadas respectivamente.
El modelo Paddington de Chloé.
Dionysus de Gucci.
Una vez que un modelo entra al mainstream, muchas huyen hacia la próxima tendencia. 2008 fue el años de la PS1 de Proenza Schouler. Diseñada para ser una anti-cartera, el modelo utilitario destronó a los modelos promocionados por celebrities de principios de la década de 2000. En los últimos años, las compradoras han dejado sus costosas carteras de lujo en el fondo del armario y salieron a buscar las de marcas Insta-famosas como Cult Gaia y Simon Miller.
PS1 de Proenza Schouler.
Solo basta con prestar atención a la cartera Saddle bag de Dior para comprobar que la moda es cíclica. El modelo, de principio de los 2000, fue visto por última vez en el brazo de Paris Hilton, pero protagonizó un regreso inesperado en la pasarela de Otoño-Invierno 2018 de la marca, cuando la llevaron modelos e influencers. “Dada la velocidad con que las tendencias aparecen y desaparecen, gracias al efecto de las redes sociales, la gente empezó a buscar de nuevo piezas clásicas y tradicionales con un toque de nostalgia”, dice Rati Levesque, jefe de ventas de uno del sitio TheRealReal, donde la demanda de modelos vintage de la Saddle se duplicó este año. Levesque también vaticina que, con la inminente partida de Phoebe Philo, la tote Luggage de Céline va a volver a cobrar relevancia. “Los modelos icónicos dejaron su marca en la historia por una buena razón, y estas carteras siempre van a ser importantes”, añade Schaefer. En este sentido, después de un paréntesis lejos de los flashes, la City bag ha encontrado una nueva generación que la adoptó, entre ellas Kendall Jenner.
Un modelo vintage de la Dior Saddle Bag, nuevamente a la venta desde la próxima temporada.
¿Cómo elegir una cartera para toda la vida? “Creo que la practicidad le añade belleza a una cartera. Además, no debería ser pesada -dice Schaefer-.También considero que una cartera de diseñador tiene que poder ser guardada en una valija sin que pierda su forma. Una cartera es una declaración de principios que define a cada mujer, y por eso es la única pieza del guardarropa en la que no hay que escatimar”.