La psicóloga y especialista en bienestar Graciela Bottini analiza la resiliencia ante la pandemia, los desafíos por delante y sugiere prácticas fáciles y cotidianas para tener recurso anti-estrés.
Año nuevo, ¿hábito nuevo? ¿Meditación es una opción? Por qué no. Empezó el 2021 y renovar recursos para mantenernos en calma en el contexto de incertidumbre quizás sea un buen propósito por delante. Por lo que pasó y por lo que viene.
Para analizar pasado y futuro, y nutrirnos de consejos para sumar la meditación y otros hábitos a este año, convocamos a la psicóloga Graciela Bottini, especializada en el abordaje integral del bienestar. Durante la cuarentena del 2020, Bottini acompañó -noche a noche- a más de 80 mil personas en meditaciones guiadas a través de la redes sociales.
Ante la pregunta por lo que viene, Bottini reflexiona: “El gran desafío 2021 al que nos enfrentamos es que no sabemos cuáles van a ser los nuevos desafíos. Es permitirnos continuar “surfeando la ola”, sin siquiera saber cuáles van a ser las condiciones del mar. Confiando plenamente en nuestras capacidades, en nuestra sabiduría interna de que todo lo que suceda, lo vamos a poder transitar y superar.”
Y entonces, si todo seguirá incierto, ¿para qué se recomienda la meditación? “Tiene innumerables beneficios -sostiene la especialista- Reduce los niveles de estrés y ansiedad, tan necesario hoy para vivir en tiempos de pandemia. Permite tener la mente en calma. Fortalece el sistema inmunitario y beneficia el descanso nocturno. Genera mayor confianza, aumenta el nivel de energía”.
-¿Cómo animarse a sumar la meditación entre los propósitos 2021?
“A quien tiene alguna duda acerca de la meditación, le digo que directamente la pruebe. Que nadie se quede con la duda de cómo será. Mal no puede hacer. Así que hay que animarse y practicarla. Se necesita darse la posibilidad de hacerlo unos días y vas a sentir los beneficios que produce. Comenzar el año con una herramienta nueva, es un excelente desafío.”
1. Meditar es difícil.
Falso. “No es así. Meditar es conectarte con vos misma a través de la respiración. Es entrar en un estado diferente de consciencia”,
2. Para meditar no hay que pensar.
Falso. “¡Es imposible no pensar! Cuando meditás, observás cómo los pensamientos suceden y les permitís que sigan su camino.”
3. Se tardan muchos años en percibir los resultados.
Falso. “Puede suceder que en la primera meditación ya percibas la diferencia.”
4. Se necesita mucho tiempo libre.
Falso. “En realidad, el tiempo lo tenemos todos. Sólo es cuestión de organizarlo de forma tal de regalarse 20 minutos por día para tu bienestar”.
1. Respiraciones conscientes: “Son un hábito saludable para incorporar, el puente hacia la meditación. Respirar conscientemente te permite aliarte con el elemento aire.”
2. Conexión con la naturaleza: “Por ejemplo, tomando 15 minutos de sol por día. Así se conecta con el elemento fuego. Pisar pasto descalzo, porque une a la tierra. Y también tener contacto con el agua, aunque sea simplemente lavándote las manos.”
3. Visualización creativa: “Imaginar lo que deseás. Hace bien imaginar aquellos sonidos, escenarios y sensaciones que te hagan sentir mucho placer. Pueden ser lugares conocidos o imaginados.”
4. Agradecimiento: “Ser agradecidos es mucho más poderoso de lo que creemos. Es bueno ponerlo en práctica. Agradecer todo lo que te sucede hace bien”.
5. Tiempo de ocio creativo. “Propongo cultivar el ser y no el hacer. Dejarte llevar por la contemplación. Implementar tiempos de ‘no hacer nada’. Sólo quedarte observando tal vez un amanecer, un atardecer, con el sólo fin de admirar la naturaleza y dejarte llevar por ella.”
Graciela Bottini
*Graciela Bottini es licenciada en Psicología (MN: 71407) y Coach Internacional (Matrícula Nº 1804).