¿Confundida y complicada con tu rendimiento ante el trabajo remoto? Leé acerca de esta técnica de gestión del tiempo que puede ser muy útil para concentrarte.
Una semana más de trabajo en casa. Teletrabajo, trabajo remoto o home office: como quieran llamarle, no es exactamente lo que estamos haciendo durante la pandemia. En esta emergencia lo que hacemos es internar trabajar en medio de un caos mundial. Sin embargo, como somos seres de costumbre, tenemos que generar hábitos saludables y efectivos para mantener nuestro equilibrio.
El tiempo como valor preciado ya era tema de análisis antes de esta contingencia. Para muchas personas, enfrentarse al teletrabajo sin previa adaptación puede haber resultado confuso. Y todavía es un gran desafío. Entonces, para continuar siendo productiva sin tocar la crisis nerviosa, el método Pomodoro es útil.
Cuando se trata de concentración, cada persona tienen su propio pequeño truco. Hay quienes optan por la versión implacable de realizar una misma y única tarea sin distracción, durante varias horas.
Otros, confían en técnicas de gestión del tiempo. El método Pomodoro es una de ellas. Te contamos cómo aplicarla.
Una vez que termine ese recreo, volvé a trabajar en silencio y repetí la operación cuatro o cinco veces antes de darte un descanso más largo (de 15 a 20 minutos). Este sprint de productividad, interrumpido por el tiempo de inactividad, aumenta la creatividad y descansa el cerebro. Así se asimila mejor la nueva información.
Con los años, el método original se fue modificando y han surgido diferentes versiones. Una de ellas es trabajar en incrementos de 90 minutos en lugar de 25 minutos. Un estudio realizado en 1993 por el investigador Anders Ericsson, con 40 violinistas, reveló que los mejores eran quienes trabajaban en ciclos de 60 a 90 minutos con descansos de alrededor de 20 minutos entre ellos.